La Plaza Andaluza se construyó hacia la primera mitad del siglo XX, y su nombre guarda estrecha relación con las formas y decorados presentes en ésta. Su planta es similar a la forma de la Cruz de Los Ángeles, consta de dos corredores que se unen en una pileta en forma de estrella tartésica, símbolo del culto al sol y noción de plenitud y regeneración, expresa la unión del cielo y la tierra, el contacto entre lo divino y lo terrenal. La estrella tartésica representa el nacionalismo andaluz. La estrella de ocho puntas es originaria de Andalucía y ha sido encontrada en diferentes yacimientos arqueológicos del período neolítico, representando la adoración solar. En la mitología musulmana representa a los cuatro ángeles mayores que sujetan el trono de Dios y en el catolicismo la estrella de ocho puntas es la Virgen de la Candelaria.